jueves, 26 de mayo de 2016

El Analizador Cuántico de Resonancia Magnética en el DIF de Puerto Peñasco

El Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia, mejor conocido por las siglas DIF, es una institución pública de asistencia social y tiene como objetivo, entre otros:

 “Coordinar el Sistema Nacional de Asistencia Social Pública y Privada, promover la prestación y profesionalización de los servicios en la materia,..”

En la realidad, dicen las malas lenguas, la principal función del DIF ha sido que las esposas de los Presidentes y Gobernadores, que por el sólo hecho de serlo ya son directoras de sus respectivos DIF nacional o estatales, tengan un escaparate ante el público.

A principios de este año salió a la luz que en la delegación del DIF en Puerto Peñasco en Sonora, alguien tuvo la buena idea de ofrecer a sus víctimas, er, derechohabientes, análisis de laboratorio pero sin laboratorio. Así es, para evitarle molestias a la gente como que les midan la tensión arterial y otras tan cruentas como que les extrajeran sangren para analizarla en un laboratorio, los genios que tomaron esta decisión prefirieron hacer esos, ejem, análisis utilizando un aparato de tecnología tan avanzada que parece magia: el Analizador Cuántico de Resonancia Magnético.



(Cortesía de El Detractor)

Tan sólo por el nombre (si dice cuántico y no tiene que ver con la física cuántica, las probabilidades de que se trate de una magufada superan el 99%) y por todo lo que ofrece, con tener no más de dos neuronas completas y funcionales, uno sospecharía que este fantástico aparato era, acudiendo al lugar común que no por común deja de ser cierto, demasiado bueno para ser verdad.

Nada más mire de lo que es capaz:


(Cortesía de El Detractor)


Y todo esto sin extraer una sola gota de sangre, sólamente con sujetar una empuñadura conectada a una computadora en donde corre un programa engañabobos con luces brillantes.



(Detalle de una foto del Facebook del DIF de Puerto Peñasco)


Como ya en los blogs de Para Escéptico y El Detractor se ha tratado este asunto en particular con cierta extensión, no abundaremos en las supuestas bondades de este Analizador Cuántico de Resonancia Magnética, contentándonos tan sólo con dejar registro en esta lista de su empleo por el DIF de Puerto Peñasco, y sobre todo, la respuesta que hubo en la página de Facebook de la misma delegación estatal del DIF, donde, cuando se les trató de advertir del fraude, en lugar de hacer una investigación para ver si las críticas tenían algún sustento, mejor las borraron y siguieron promocionando la estafa, con el subsecuente riesgo a quienes, confiado en que el personal del DIF sabía lo que hacían, confiaban su salud a estos charlatanes.

Personalmente, no sé qué es peor, que ninguno de los médicos, enfermeras y personal técnico haya notado nada raro con este aparato, o que habiéndolo notado, por la razón que fuera prefirieran guardar silencio. Porque quiero creer que si se anunció que se iban a llevar a cabo estudios médicos (por así decirles), algún personal de salud debió haber estado presente, no jugando con la computadora mágica pero sí por ahí cerca...

Lo peor es que éste no es un incidente aislado. Como se irá viendo en próximas entradas, ésta no ha sido la única vez en que alguna delegación del DIF estatal ha servido para que charlatanes de las más variadas especialidades hagan de las suyas a expensas del dinero público y, no lo dude, la salud de más de uno.

martes, 24 de mayo de 2016

Regresamos...

...espero.

Sí, lo sé, no tiene que recordármelo. Ha pasado mucho tiempo desde nuestra última entrada y aunque me hice el propósito —de año nuevo, por supuesto— de escribir con regularidad en esta lista, por una u otra razón no lo he hecho y por ello, pido una disculpa.

Porque mire que no la ausencia de entradas nuevas en La Lista de la Vergüenza capítulo México no se debe a que no haya material. Ojalá y así fuera, pero como ya se imaginará, no es así en lo absoluto. Si me sigue en Twitter estará al tanto de que de vez en cuando comparto algunos hallazgos por allá, mismos que a partir de ahora iré retomando para anotarlos aquí.

Hablando de redes sociales, por si acaso no lo sabe, le informo que también estamos en Facebook. La idea, como con la cuenta de Twitter, es facilitar difundir las entradas de este blog.

Si bien espero escribir más seguido por aquí, no puedo comprometerme a hacerlo con periodicidad, lo cual tendrá como resultado algunos cambios en el blog, más que nada en las gustadas votaciones para elegir a las grandes vergüenzas. Ahora, en lugar de hacer la votación mensualmente se hará cada 10 entradas, así no habrá problema si, por ejemplo, en un mes sólo puedo escribir una entrada nada más. Por lo mismo, dejarán de llevar el nombre del mes en el que fueron elegidas y pasarán a estar numeradas. Creo que conservaré la numeración que corresponde para darle un poco de continuidad.

Para finalizar por hoy, un anuncio y un brindis: siguiendo una sugerencia de César de la Luz, mejor conocido como El tío César, añorado compañero en estas lides del escepticismo, de los pocos reporteros que se atrevió a escribir en varias ocasiones acerca del fraude de los detectores moleculares GT200 y cuyo interés en ello no sólo no obtuvo eco entre sus colegas sino al contrario, hubo quien en su momento se burló por ello, se añadió al menú principal del blog el Manifiesto por una universidad libre de pseudociencia  y oscurantismo, publicado originalmente en el blog La Ciencia y sus Demonios en 2011 y que ha sido reproducido en innumerables sitios.

Me hubiera gustado que César viera que al fin lo puse, pero como tal cosa es imposible, sólo puedo dedicárselo: ¡a tu salud, tío César!