Porque en efecto, la gente de Chapingo, particularmente la del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias para el Desarrollo Rural Integral y el Centro Regional Universitario del Anáhuac, ha seguido ofreciendo su taller de magia homeopática , digo, su conocimiento holístico, que incide en la producción agropecuaria con productos no contaminantes y que contribuye al control de plagas, enfermedades, salinidad, heladas, sequía y conservación de alimentos, así como inducir el incremento de la biomasa de los cultivos o el aumento en carne del ganado, como podemos ver en este folleto de septiembre:
O en este otro dirigido específicamente a los productores de café en Chiapas:
Supongo que los producores agropecuarios han de pensar que una universidad tan prestigiosa —en serio, Chapingo, antes de sumergirse en la pseudociencia tenía prestigio— como ésta no les va a enseñar basura. Porque eso y no otra cosa es la homeopatía, aunque tenga el prefijo de agro.
Inocentes...
