En marzo de este año nos encontramos con que la Facultad de Enfermería de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos estaba próxima a inaugurar un diplomado en "terapias integrativas".
Dado que el diplomado éste tiene una duración de dos años, es decir, que para el momento en que se publique esta entrada apenas van a ir con los prolegómenos, creo que estamos a buen tiempo para incluirlos en esta lista. Si se pregunta por qué y el nombre de "terapias integrativas" no le dice gran cosa, entonces échele un vistazo al temario general:
Fuera de los módulos de plantas medicinales —que a fin de cuentas son química, con todos los pros y probablemente más contras que las medicinas de patente— y el de masaje —que de curativo tiene más bien poco pero puede ser muy relajante y sabroso—, el resto, como la iridología, la magnetoterapia , la auriculoterapia, las flores de Bach, la osteopatía craneosacal y la terapia neural son pseudociencias puras y duras. Del manejo de energía sanadora ni hablo, porque eso está, de plano, en otro nivel de la estulticia.
En cuanto al módulo de urgencias médicas con terapias integrales no puedo sino imaginarme algo como esto:
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Pero en broma, se entiende.
Por tan sólo la módica cantidad de $20,500.00 —incluyendo la inscripción y el diploma— y varias horas de vida tiradas a la basura, los asistentes a este evento académico de altísima calidad pueden tener un bonito papel con el cual la UAEM los avalará como... no sé, brujos, supongo.
Una gran oferta, ¿no?